En primer término, los estudiantes de FP de Diseño y Edición de Publicaciones Impresas y Digitales del IES Pando. LUISMA MURIAS

"De algo simple puede salir algo grande". Con esa lección aprendida fue con la que salió Santiago Martínez, alumno de Formación Profesional del IES de Pando (Oviedo), de la conferencia que ofreció ayer el poeta y nombrador Fernando Beltrán. Su compañero Alejandro García, añade a su lado: "Yo venía un poco a regañadientes, pero me ha gustado, he aprendido bastante". Ambos formaron parte de un grupo de treinta alumnos del citado instituto ovetense que cursan el módulo de Diseño y Edición de Publicaciones Impresas y Multimedia y que ayer presenciaron la conferencia de Beltrán desde primera fila. No se perdieron detalle. Algunos plantearon sus dudas al experto al acabar la charla y a más de uno le entró el gusanillo de saber más sobre un oficio del que conocía bastante poco, según reconocieron. Compartieron sala con decenas de alumnos de Administración y Dirección de Empresa y de Economía de la Universidad de Oviedo.

"Yo entiendo que él (Beltrán) viera esto como una salida, porque todo esto no existía de aquella. Ahora todo está ya más complicado", asegura García, natural de Luarca y de 21 años. Explica que su aspiración es ser diseñador gráfico o hacer algo relacionado con el dibujo. "Me gustaría ser artista", contesta. Muchos reconocían ayer que habían hecho algunos pinitos poniendo nombres, al estilo de Fernando Beltrán. "A algún plato de comida que hago o a algunas galletas sí que las he bautizado", añade Martínez, de Lastres y con 24 años. "El de nombrador parece un oficio complicado", añade García.

Una de sus profesoras, María del Mar de la Peña, explica: "Son estudiantes de Diseño pero el tema de las marcas está muy relacionado". Y como si estuvieran en clase les recomienda: "Si hacéis algún logo para algún cliente, todas estas cosas que se han explicado hoy deberíais tenerlas en cuenta". Muchas veces hay que buscar la simbología de las palabras. "Por ejemplo, hemos visto que con girar una 'e' basta", asegura. Fue lo que hizo el propio Beltrán con el nombre de Amena, el primero de sus grandes trabajos y por el que ha sido altamente reconocido. "Se trata de buscarle la historia que tienen detrás las marcas y su significado", asegura la docente.

LNE- 28/10/2017